No importa el sinnúmero de barcos, que me viajan de aquí para allá, de allá para otro aquí. Lo cierto es que el velo de lo que nunca ha sido, cae como una cosquilla, que me libera los ojos, y burlón susurra al oído "acá tampoco, acá tampoco..."
Me voy. No sentiré nostalgias.
17 de diciembre 2006. Buenos Aires. Argentina.
sábado, diciembre 16, 2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario